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Publicado: 2013-08-01
Por: Jorge Moreno
El historiador y analista político Nelson Manrique en conversación con NoticiasSER evaluó el último menaje del presidente Ollanta Humala y las implicancias del mismo.
- ¿Cómo evalúa el mensaje del presidente Humala en el contexto actual?
- La impresión que me causa el mensaje es que el Gobierno continúa en piloto automático. Creo que se va a dejar las cosas libradas a que haya mayor inversión, a que se van buscar la manera de eliminar lo que consideran trabas a la inversión. Creo que se sigue gobernando en función de los intereses de una minoría, una minoría que estuvo en contra de Ollanta Humala durante la campaña de 2011, con una campaña sucia y millonaria contra él y para la cual él gobierna en este momento.
- ¿Su anunció de la ‘muerte civil’ de los corruptos manifiesta una verdadera intención del presidente de luchar contra este flagelo o es un saludo más a la bandera?
- Si lo pone en el contexto de las movilizaciones creo que es un saludo a la bandera. Se elaboran leyes sin consultar a las partes involucradas y cuando estas se movilizan para manifestar su descontento, se les arroja la policía, se les reprime. No creo que haya una real voluntad de crear leyes consensuadas, donde se recoja los puntos de vista de los involucrados.
- En su mensaje el presidente también habló de replantear la descentralización. ¿Cómo debemos interpretarlo habida cuenta que lo hace cuando ya en las regiones se está pensando en las elecciones del 2014?
- Estamos de acuerdo en que la regionalización debe replantearse. Esta no solo es cambiarle el nombre a los departamentos, convirtiendo 24 departamentos en regiones y transferir algo de recursos. Pero el Gobierno tendría que plantear una propuesta de regionalización sobre la cual discutir, eso es lo fundamental.
- En el menaje presidencial el tema de la política cultural del Gobierno estuvo ausente ¿Cómo interpretar eso?
- Es parte de la continuidad. La cultura es vista como gasto, no como inversión. Se le ve como la última prioridad. Heredó del gobierno aprista un ministerio de Cultura, pero no se lo dota de recursos. Es la última de las prioridades de lo que son los motivos de preocupación del Gobierno. En eso también hay una continuidad, se sigue la lógica del piloto automático.
- A partir de los anuncios presidenciales en su mensaje, ¿habrá un reflujo de las protestas sociales o estas aumentarán?
- Creo que van a continuar e incluso se van a intensificar. La noticia que sale hoy [31 de julio]en “La República”, en el sentido de que el canon minero sufre una retracción de una tercera parte de su valor, y en regiones como Cusco hay una pérdida del 90% del canon. Creo que hay una serie de indicadores preocupantes de la economía internacional, que las condiciones están dadas para lo que ha sido una movilización como las que se han desplegado este último trimestre. Creo que vamos a tener protestas el resto del año.
- Una apreciación final sobre el discurso presidencial.
- El piloto automático funciona en periodos de estabilidad relativa, pero entrando a un periodo de turbulencia hay que tomar decisiones y creo que el Gobierno tendría que empezar a diseñar una estrategia para encara una situación que se avizora como conflictiva.
